Dos programas de planteamiento similar acaban de estrenarse en sendas cadenas nacionales: “Splash!”,en Antena 3 y “Mira quien salta”, en Telecinco. A primera vista podrían parecer hermanos gemelos, pero no; cada uno responde a la idiosincrasia de su cadena, y en donde más , en lo que supone la pimienta de este tipo de programas: los famosos en bañador.
En Antena 3 apuestan por el traje de baño de una pieza para ellas y el short tipo boxer para ellos. Correctísimo, apto para todos los públicos y con un punto de humor casi de cine mudo gracias a los modelazos imposibles de Falete y sus chapuzones. Y en Telecinco, las chicas, incluso con lo mínimo que dan por prenda, no renuncian a lucir pedrería, brazaletes, cruzados mágicos y cortes espectaculares: como muestra, un botón, Mar Segura ( sí, la de Mujeres Ricas), boloncios dorados a tutti plen y estampado blanco y oro ( como si fuera un adelanto, pero que muy adelantado, de la burbujita Freixenet). Con tanta pedrería y tanto abalorio, el salto en pico lo tienen garantizado, con las bolas(de adorno, que se entienda bien, por favor) por delante.
Lo de Falete merece capítulo aparte. Es indescriptible, por mucho que nos empeñemos. Del albornoz-bata de cola al maquillaje tan apropiado para saltar desde una piscina, por no hablar de los outfits tipo señor de los años veinte con camiseta de tirantes. Muy tendencia.
En la cadena de Mediaset, la lentejuela impera incluso en la piscina: bikinis joya, trajes de baño de una pieza ( seguro que a Carmen Lomana , esta vez en la cadena rival, como buena señora de Donosti, le horroriza la palabra “bañador”) y mucho turbo, más o menos afortunado, para ellos. Raquel Mosquera con un típico “que me estilice un poquito, que me haga más delgada” cuando se lo pide a la dependienta de El Corte Inglés. YNatalia Millán y Mónica Pont, apostando por el no estampado y el aspecto deportivo. Lo de Fortu es otro tema, espectáculo y del bueno. Y si me preguntan, la mejor ( al menos en traje de baño) Olvido Hormigos. Con tatuaje asomando por el agujerito del ombligo trikinero, en plan, “parezco ermita pero soy catedral”.
Del equipo rival, el de Antena 3, destacan una Romina Bellusccio recuperadísima y absolutamente espectacular (pero sin atreverse con el traicionero bikini) en traje de baño de ¿una pieza?. El cocinero Dario Barrio deja la toca y la cuchara y se atreve a enseñarse en plan nadador con pedazo tatuaje maorí. Mucho negro en los trajes de baño de una pieza para ellas, y ellos, short tipo “boxer” y obligatorio, torso depilado.
En lo que coinciden ambos programas es en el destierro definitivo del pelo en pecho: debió haber una sesión de grupo, previa, en la que eliminaron hasta el último pelo masculino tipo Rapa das bestas.
Este año, la moda baño no está en los grandes almacenes, si no en la televisión.
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